sábado, 19 de marzo de 2016

Planeta deshabitado, cuento.

La nave nodriza se destrozó al chocar contra la superficie rocosa durante el aterrizaje forzoso. Toda la tripulación murió y solo yo sobreviví. Aterricé en un planeta, cuya órbita se hallaba rodeada de incontables bolas anaranjadas incandescentes.